La bufanda

Autor: Mauricio Pecci

Estaba a punto de salir de mi casa cuando mi padre, Benjamín, me dijo que me abrigara.
-Ya estoy abrigada.
-No suficiente, hace mucho frío afuera.
-¿Que más me puedo poner?
-Ponte una bufanda.
-No tengo ninguna.
-Revisa entre las cosas viejas de tu bisabuela, seguro encuentras alguna.
-Está bien, pero solo me la pondré si siento mucho frío.
Entonces me dirigí a la habitación donde estaban las cosas de mi bisabuela. El lugar olía a muerte. Entre toda esa ropa vieja, encontré una foto de mis bisabuelos en lo que parecía ser su primera cita. Mi bisabuelo amaba mucho a mi bisabuela, pero tuvo que ir a la guerra y murió, lo que obligó a mi bisabuela a criar sola a sus cuatro hijos. Siempre la respeté mucho por ello, aunque realmente no la conocí en persona. Volviendo a la foto, en ella tenía una bufanda amarilla, la misma que encontré al lado de la foto. Luego de encontrar la bufanda, salí.
Me tenía que encontrar con mis amigos a las 8 de la noche, pero ya estaba llegando tarde. Deseé tener la habilidad de viajar en el tiempo. Mi padre tenía razón, hace mucho frío. Que suerte que traje una bufanda.
Me puse la bufanda y empezó a nevar. Lo curioso es que la calle lucía como si llevara mucho tiempo nevando. Eso me extraño mucho, pero finalmente había llegado al restaurante de comida china donde me encontraría con mis amigos, o al menos donde debería estar, porque en su lugar había una tienda de pesca. ¿Será que me equivoqué de dirección? ¿Mudaron el edificio? Intenté llamar a mis amigos para decirles que no podría venir, pero mi teléfono no funcionaba. Decidí entrar a la tienda de pesca.
-¿Hola puedo usar su teléfono? - Se veía muy extrañado por la pregunta.
-Perdón, pero no sé lo que es un teléfono.
Salí de la tienda algo confundida. ¿Como es posible que no sepa lo que es un teléfono? Bueno, iré a casa y hablaré con mis amigos mañana.
Al llegar ahí, una mujer salió de mi casa, no sabía quien era pero se me hacía conocida, se parecía a mi bisabuela. Pero no puede ser, mi bisabuela murió hace ya más de 21 años. Justo cuando iba a preguntarle quién era, un chico parecido a mi bisabuelo de joven apareció. No puede ser una coincidencia, tienen que ser ellos. Decidí seguirlos hasta el bar donde tuvieron su primera cita, ahora estoy segura de que son ellos, pero ¿cómo es posible? Analicé un poco la situación y me di cuenta de que cuando me puse la bufanda la nieve apareció mágicamente, así que me saqué la bufanda y la nieve desapareció. Volví a casa y guardé la bufanda donde nadie la vea. Aún no decidí si quiero usarla.


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